- DIETMAR BRAUNER, EMPLEADO DE LÍNEA DE PRODUCCIÓN, PENSÓ QUE SU CARRERA DE 30 AÑOS HABÍA TERMINADO DESPUÉS DE QUE PROBLEMAS DE SALUD RECURRENTES AFECTASEN A LA MOVILIDAD DE SU HOMBRO Y UNA MUÑECA
- SIN EMBARGO, AHORA ESTÁ PONIENDO TODA SU EXPERIENCIA AL SERVICIO DE UNA MAYOR VARIEDAD DE TAREAS GRACIAS A UN NUEVO COLEGA: UN ROBOT COLABORATIVO AL QUE HA APODADO ROBBIE
30.5.2022.- El cobot Robbie está diseñado para colaborar con personas con movilidad reducida o discapacidades, asumiendo tareas que, de otro modo, les resultarían difíciles o imposibles. Tras el éxito del periodo de prueba de 18 meses, Ford se queda con Robbie de forma permanente, lo que podría llevar a la instalación de más cobots en las plantas de producción de Ford para ampliar las oportunidades de trabajo a una gama más diversa de personas.
«A lo largo de los años, cada vez me resultaba más difícil hacer mi trabajo. Entonces, llega este pequeño robot y, para mí, es como tener un brazo extra, un brazo extra muy fuerte», asegura Dietmar. «Lo ha cambiado todo. Espero que abra la puerta a que otros como yo tengan la oportunidad de hacer, o seguir haciendo, los trabajos que les gustan».
Trabajo en equipo
Dietmar y Robbie trabajan juntos en la cadena de montaje de Ford en Colonia, colocando cubiertas circulares en los motores. Dietmar coloca dos cubiertas en los soportes y le pide a Robbie que levante cada una y las presione firmemente en su lugar. Esta tarea de precisión requiere alinear perfectamente los agujeros para que Dietmar pueda utilizar un destornillador eléctrico para fijar las cubiertas y el motor se mueva a lo largo de la línea.
El proyecto de investigación de Ford se diseñó para demostrar que las personas discapacitadas y con movilidad reducida podían desempeñar trabajos en la industria manufacturera sin necesidad de dispositivos de protección ni barreras de seguridad. Robbie se mueve solamente cuando lo activa Dietmar y tiene sensores que detectan cuándo sus manos o dedos pueden estorbar.
El premiado proyecto de investigación ha contado con el apoyo de la Universidad RWTH de Aachen y de la Landschaftsverband Rheinland (LVR), el mayor proveedor de servicios para personas con discapacidades de Alemania, que aportó 372.000 euros de financiación.
Anteriormente, Ford ha presentado otros cobots programados para ayudar a los trabajadores de la línea de producción en procedimientos complejos, como el pulido de vehículos, y también un robot de conducción autónoma llamado «Survival», creado en la planta valenciana de Ford en Almussafes.
«El cobot Robbie ha ayudado a demostrar la amplia gama de funciones que pueden desempeñar las personas con discapacidad y con movilidad reducida si se tiene el cuidado de diseñar un entorno de trabajo que se adapte específicamente a las necesidades del trabajador. Los robots colaborativos podrían ayudar tanto a crear más puestos de trabajo como a ampliar las carreras de nuestros empleados actuales» (Oliver Färber, director de Operaciones de Motores de la planta de Colonia, Ford Europa).
«Hemos implantado un lugar de trabajo centrado en el ser humano único en la industria. Tras el éxito de este proyecto, ahora estamos implementando este tipo de lugares de trabajo en otros proyectos específicos para personas discapacitadas. De repente, las posibilidades de colaboración entre humanos y robots parecen infinitas» (Mathias Hüsing, profesor de la Universidad RWTH de Aachen).
Fuente: Ford
Fotografía: Ford