AECA-ITV ADVIERTE QUE LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS DEBEN GARANTIZAR SU CALIDAD E INDEPENDENCIA, ASEGURAR LA COBERTURA MÁS ADECUADA DEL TERRITORIO Y PROCURAR LA VIABILIDAD MÍNIMA DE LAS EMPRESAS QUE LO REALIZAN
Madrid, 2 de abril de 2013. El actual sistema de gestión del servicio de ITV garantiza la calidad de las inspecciones y mantiene la fiabilidad de los operadores por ser estos independientes del sector de la automoción. Un sistema que no tenga en cuenta esto podría hacer decaer la calidad del servicio, y por ende afectar a la seguridad vial, además de que el servicio de inspección podría dejar de cubrirse en algunas áreas geográficas por no ser rentables. De ahí que dependa en su totalidad de las Comunidades Autónomas, que son responsables del mismo.
No obstante, AECA-ITV no tiene preferencia de un modelo sobre otro, simplemente advierte que la prestación de este servicio debe planificarse por las Comunidades Autónomas, de tal suerte que garantice su calidad e independencia, asegure la cobertura más adecuada del territorio y procure la viabilidad mínima de las empresas que lo realizan, evitando situaciones de competencia que derivarían en una merma en la calidad y el rigor de la inspección.
AECA-ITV y la mayoría de las Administraciones públicas competentes, consideran que este servicio público debe estar regulado y planificado el número de centros de ITV, prestado por entidades independientes de cualquier otra actividad sobre vehículos, y acreditadas por la Entidad Nacional de Acreditación ENAC.
Es necesario, por tanto, una tutela de la Administración sobre estos centros y empresas, evitando así una desregulación que llevaría a un sistema imposible de ser controlado para garantizar el rigor de las inspecciones. Si a ello se uniera la autorización para qué empresas incompatibles con la inspección técnica –como las de reparación y/o venta de vehículos o de sus componentes- pudieran realizarlas, la actividad sería completamente incontrolable por parte de la Administración, con el consiguiente perjuicio para la seguridad vial.
El tiempo transcurrido, la práctica profesional y la creciente sensibilización social por la seguridad vial y el medio ambiente han venido a confirmar a las estaciones de Inspección Técnica de Vehículos como instalaciones imprescindibles y necesarias, pues la ITV salva vidas, evita accidentes y aminora las afecciones medioambientales de los vehículos a motor, ayudando a la protección del consumidor ante la compra de vehículos nuevos o usados, velando para que los usuarios del transporte público viajen en vehículos especialmente seguros.
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Texto: Offon Comunicación.
Fotografía: AECA-ITV.