- EL CLUB VALENCIANO HORTACLÀSSICS EL PASADO DIÁ 14 CELEBRÓ LA SEGUNDA EDICIÓN DE SU RALLY FOTOGRÁFICO CLÁSICOS DEPORTIVOS OTOÑO HISTÓRICO
- LA RUTA ESCOGIDA, BÉTERA-GELDO, PERMITIÓ A LA VEINTENA DE CLÁSICOS PARTICIPANTES DISFRUTAR DE LOS PARQUES NATURALES DE LA SIERRA CALDERONA Y DE LA SIERRA DE ESPADÁN
- LA PERFECTA ORGANIZACIÓN Y EL ENCANTO DEL RESTAURANTE ESCOGIDO PARA DISFRUTAR DE LA COMIDA, FUERON FACTORES CLAVE PARA DISFRUTAR DE UNA AGRADAB LE JORNADA AL VOLANTE DE NUESTROS CLÁSICOS
Valencia, 15 de septiembre de 2014.- Los socios de HortaClàssics esperaban con expectación la fecha marcada en el calendario que señalaba la celebración del II Rally Fotográfico…. Tras el éxito de la primera edición, realizada el año pasado, y el buen sabor de boca que dejó, no faltaban motivos para ello.
De la edición de este año no se supo nada hasta la víspera, sólo que el mismo se realizaría por la Comarca del Alto Palancia, bello enclave natural a caballo entre las provincias de Valencia y de Castellón. Además, sabiendo en su organización había participado Óscar Muguruza, éste sería todo un éxito.
El domingo por la mañana, al volante del Jeep CJ3A del año 1950 con el que iba a participar, tras recoger a mi copiloto Yanela -con quien disfruté de una agradable jornada- nos dirigimos a Bétera, en cuya Alameda se había fijado el punto de reunión previo a la salida.
Tras estacionar los coches junto con el resto de los clásicos que ya habían llegado, procedimos a cumplimentar los trámites de rigor: cotejo de la documentación del coche para comprobar que todo está en regla, entrega de dorsal y bolsa con rutómetro, etc. Una vez resueltos los trámites de la inscripción, pudimos disfrutar de un buen, y necesario, almuerzo.
Nos esperaban por delante muchos kilómetros de conducción exigente y ¡era preciso estar a tope de energía!. Aprovechando el almuerzo el Presidente del Club, Pablo Vila, realizó una breve presentación del rally, su recorrido y normas a respetar durante el mismo. Básicamente, este rally consiste en realizar una ruta marcada en el libro de ruta y responder unas preguntas formuladas en un cuestionario que se entregó a cada equipo participante, que se resolvían mediante la observación atenta del paisaje y de las fotos que se mostraban a modo de pistas….
Después del almuerzo aproveché para fotografiar qué coches iban a participar: Chevrolet Corvette 4 y Camaro, Daimler 3.6, Ford Mustang, Hispano Alemán Mallorca, Jaguar Mk. II, Mercedes 190SL y 500SL, MG A y B GT, Opel Kadett Cabrio, Porsche 911, SEAT 850 Sport, Subaru Impreza, Toyota Celica, Volkswagen Escarabajo y Golf Cabrio, etc. Una interesante mezcla de modelos clásicos, youngtimers (o futuros clásicos) y vehículos actuales que aspiran a la condición de clásicos.
A partir de las diez de la mañana se empezaron a dar las salidas de los equipos participantes, a intervalos regulares. La salida hasta la afueras de Bétera estaría neutralizada al contarse con la colaboración de la Policía Local para facilitar el tránsito por el interior de la población.
Una vez que nos dieron la salida, y tras un pequeño despiste, nos incorporamos a la ruta, circularíamos por las CV333 y CV25. Los primeros kilómetros fueron tranquilos, permitiéndome comprobar que el coche iba y respondía bien, aunque con un destacado consumo de aceite, manifestado por la estela de humo blanco que nos acompañó durante parte del recorrido, con la consiguiente queja de los participantes que iban detrás de nosotros, quienes nos fueron adelantando cuando pudieron…
Siguiendo el rutómetro fuimos pasando las poblaciones previstas, Olocau, Gátova, mientras nos íbamos internando por el Parque Natural de la Sierra Calderona. En un momento dado, ante la sospecha de que alguno de los niños que se habían subido al coche durante el almuerzo me habían engranado la tracción al eje delantero, con la consiguiente pérdida de velocidad y aumento del esfuerzo al que se somete a la transmisión, la desconecté, para circular sólo con la tracción engranada al eje trasero, lo cual permite que el Jeep circule por asfalto alegremente y con total seguridad.
Con una excelente temperatura, curvas y más curvas, el trayecto fue divertido, aunque la constante presencia de ciclistas obligaba, cuando era preciso, a circular a su velocidad hasta que pudieron adelantarnos. La bajada hacia Segorbe fue intensa, dada la ausencia de servofreno del Jeep y falta de retorno de la dirección, lo que me obligó a emplearme a fondo con brazos y pierna derecha…. Y a ello, hay que añadir la ausencia de puertas, de modo que si bien yo iba agarrado al volante, Yanela tuvo que asirse en más de una ocasión al asidero previsoramente colocado en el salpicadero para este fin.
Los frenos, a pesar de ser unos sencillos tambores, respondieron muy bien, sin acusar fatiga a pesar del duro trato que recibieron. El sencillo cambio de tres velocidades que lleva el simpático 4×4 ofrecía una limitada capacidad de retención cuando se desciende un puerto por una carretera a una cierta velocidad, y tampoco es conveniente castigar la mecánica engranando la tracción al eje delantero, y menos la reductora con la que cuenta… Ahora bien, campo a través hubiera sido otra cosa…. Sin dudarlo, la conducción de vehículos como este Jeep Willys es la conducción en estado puro.
Tras atravesar Segorbe nos dirigimos a la segunda parte del recorrido, bastante más exigente para el Jeep y para mí que la anterior. La carretera CV nos fue llevando por pueblos tan pintorescos como Almedíjar, Aín, Eslida, Chóvar, Azuébar, y Soneja. Con todo, ya compenetrados con el Jeep fue un paisaje del que disfrutamos intensamente. Además, tuvimos la ventaja de compartir esta parte del recorrido con dos bonitos Ford Mustang cabrio, de los años 60 que formaban una preciosa estampa.
Tras recorrer este hermoso paraje, en el que aún eran visibles las dramáticas cicatrices de incendios forestales recientes, nos incorporamos a la Autovía Mudéjar N234, para dirigirnos de nuevo hacia Segorbe. Un despide mío provocó que diéramos un pequeño rodeo por la autovía, hasta poder tomar la salida correcta. El rato que rodamos por autovía –así como el trayecto de 60 kms que realizamos para volver a Valencia después de comer- no fue tan grato, porque el Jeep no está hecho para este entorno, aunque puede rodar a 80-90 km/h sin problemas, uno se encuentra fuera de su entorno natural haciendo la conducción menos placentera y exigente por el mayor nivel de atención y concentración que exige.
Tras bordear Segorbe nos dirigimos a la vecina población de Geldo, en cuyo término se encuentra la Masía Durbá, preciosa masía donde íbamos a comer. Tras recorrer un centenar largo de kilómetros llegamos exhaustos y cansados, pero bien. ¡El Jeep se portó como un campeón!
La Masía Durbá es una edificación del s.XVIII, asentada sobre los vestigios de una villa romana, que preside una finca rural de 23 hectáreas cuajada de almendros y algarrobos.
Después de entregar el cuestionario al comité que lo corregiría, nos tomamos un aperitivo, tras el cual se sirvió la comida en un bonito salón reservado para el rally; por lo que oímos, y comentamos, todos los participantes disfrutamos de la atractiva ruta y de nuestros coches, hacía tiempo que no hacíamos una ruta tan entretenida.
En cuanto a la comida, fue sabrosa y permitió degustar productos de la gastronomía local; después de la misma se entregaron los trofeos a los tres equipos que hubieran acertado el mayor número de respuestas; los mismos fueron entregados por el presidente del club y por el participante Alberto Asunción.
Como se produjo un empate entre los tres primeros equipos con el mayor número de aciertos, el desempate se efectuó, según el Reglamento de la prueba, según los tiempos de llegada a la Masia Durbá.
Así, los trofeos correspondieron a:
Primer clasificado: equipo formado por Vicente Roig y su familia.
Segundo clasificado: equipo formado José María López y su mujer.
Tercer clasificado: equipo formado por Alan Fochesato y Carlos Romero de Ávila.
A título meramente informativo, Yanela y yo quedamos en una meritoria quinta posición, ¡cosa de la que estamos muy orgullosos!
Acto seguido, los de algunos participantes extrajeron los boletos para el sorteo de los regalos donados por las empresas patrocinadoras. HortaClàssics quiere agradecer a las empresas ABC Imprenta, Clínicas DH, Adeslas SegurCaixa (Oficina Torrent), CM Stores y Aguas Mondariz su colaboración para haber hecho posible la realización de este rally.
Desde Clásicos al Volante felicitamos a HortaClàssics por el excelente trabajo realizado para que hayamos podido disfrutar de una jornada tan agradable.
Más información:
Texto: Juan Inigo Ros
Fotografías: Juan Inigo Ros y empresas patrocinadoras
