DETROIT – A LO LARGO DE LA HISTORIA, CADILLAC HA DESEMPEÑADO UN PAPEL IMPORTANTE EN EL TRANSPORTE DE LOS PRESIDENTES DE LOS ESTADOS UNIDOS CON SEGURIDAD Y ESTILO. AQUÍ HAY 10 HISTORIAS QUE NARRAN LA RELACIÓN ENTRE CADILLAC Y EL COMANDANTE EN JEFE.
El Presidente Woodrow Wilson montó en un Cadillac serie de 53, del año 1916, por las calles de Boston durante el Desfile de la Victoria tras la Primera Guerra Mundial de 1919. Modelos de Cadillac fueron utilizados durante la guerra en Europa debido a la potencia y la durabilidad de los motores, en particular de los primeros motores V8 fabricados en grandes series.
Un lujoso Cadillac 341 con carrocería Town Car, del año 1928, fue utilizado al final del mandato de Calvin Coolidge. La Serie 341 se presentó en 1928 y contó con un motor de ocho cilindros en V que desarrollaba 90 caballos de fuerza, una caja de cambios de tres velocidades y faros con haz orientable. Preparados para el Presidente de los Estados Unidos, el Cadillac de 1928 encarnaba la maestría artesanal y artística.
Después del ataque a Pearl Harbor, el Presidente Franklin D. Roosevelt usó un Cadillac Town Sedan blindado de 1928, ejemplar que, según la leyenda, fue originalmente propiedad del gángster Al Capone.
En 1938, dos Cadillac convertibles, denominados «Queen Mary» y «Queen Elizabeth» fueron entregados al gobierno de los EE.UU. Bautizados como los grandes transatlánticos de la época, los vehículos medían 21,5 pies de longitud, pesaban 7,660 libras cada uno y estaban equipados con un pequeño arsenal, radios de dos canales y generadores de alta potencia. Duraderos y fiables, las dos «Reinas» sirvieron a los presidentes Franklin D. Roosevelt, Harry S. Truman y Dwight D. Eisenhower.
El Presidente Eisenhower, un conocido entusiasta de los coches, viajaba en una de las primeras unidades producidas del modelo Eldorado durante su desfile inaugural 1953. Este modelo representó un hito en la historia del diseño automovilístico, ya que fue el primero en estrenar un parabrisas envolvente, que rápidamente fue adoptado por los restantes modelos de producción.
En 1956, los Queen Mary II y Queen Elizabeth II reemplazaron a los convertibles de las series originales, para servir al Presidente Eisenhower, y continuar sirviendo a los presidentes John F. Kennedy y Lyndon B. Johnson. Ambos vehículos fueron retirados en 1968.
La administración de Ronald W. Reagan recibió una limusina Cadillac Fleetwood 1983 y un Cadillac Fleetwood Brougham. A menudo se afirma que la verdadera limusina presidencial Cadillac Fleetwood fue la que se utilizó en la película de 1993 “En la línea de fuego”, protagonizada por Clint Eastwood, pero en realidad era una réplica cuidadosamente construida y no el vehículo particular utilizado por los presidentes en aquélla época. Por razones de seguridad, los vehículos presidenciales ya no se utilizan fuera de sus funciones oficiales.
El Cadillac que debutó para el servicio durante la administración de William J. Clinton en 1993 marcó una nueva era. Hasta este momento, los vehículos presidenciales por lo general eran modelos de producción modificados por las compañías carrozadoras de limusinas. El 1993 el “Presidencial Brougham” fue diseñado, desarrollado y construido por Cadillac en un proceso seguro que continúa hoy, con los vehículos presidenciales fabricados en secreto con arreglo a unas especificaciones exhaustivas.
La limusina de Cadillac Fleetwood del año 1983 está custodiada en la Biblioteca Ronald W. Reagan y Museo Presidencial en Simi Valley, California, mientras que el Cadillac Fleetwood Brougham de 1993 se encuentra en el Centro Presidencial Clinton en Little Rock, Arkansas.
Hoy en día, la limusina presidencial Cadillac debutó en el desfile inaugural del Presidente Obama el 20 de enero de 2009, ante una audiencia mundial. Apodado como «Cadillac One», siguiendo el ejemplo de la nomenclatura de los aviones presidenciales, la limusina actual incorpora el diseño y los elementos técnicos de los automóviles Cadillac de producción, pero ha sido construido exclusivamente para su misión. Las especificaciones del coche son únicamente conocidos por el pequeño equipo que lo diseñó. La diferencia más visible es una silueta más erguida que la de sus predecesores, para mejorar la visibilidad hacia el exterior.
Cadillac ha sido una marca líder de automóviles de lujo desde 1902. En los últimos años, Cadillac sufrido un renacimiento histórico liderado por la ingeniería artística y tecnología avanzada.
Texto por: Clásicos al Volante.
Fotografías por: Cadillac.