- HYBRID4: FULL HYBRID DIESEL.
- CON UN SISTEMA DE ARRANQUE ÚNICO EN EL MERCADO.
- EFICIENCIA MÁXIMA DENTRO Y FUERA DEL ASFALTO.
22 de junio de 2012.- El nuevo Peugeot 508 RXH ha llegado al mercado español planteando un nuevo concepto de automóvil. Combina tres universos, All Road, HYbrid4 y 508 para dar como resultado una propuesta Peugeot inédita en el mercado, un producto de gama alta que representa un verdadero escaparate tecnológico de la Marca. Pero hay más cosas que hacen especial a este nuevo modelo, entre las que destaca su condición de híbrido, o lo que es lo mismo, su catalogación como Full HYbrid Diesel, algo que sólo Peugeot estaba en disposición de ofrecer.
Tecnología Premium
La construcción de una marca o un producto Premium no es algo que pueda abordar cualquiera. No es tan simple como puede parecer, ya que ha de estar basada en una calidad de ejecución al más alto nivel y unas aportaciones tecnológicas de gran calado que distingan a la marca o al modelo en cuestión como tal frente a la competencia. Las aspiraciones del Peugeot 508 RXH en este sentido están sólidamente cimentadas no sólo en el salto cualitativo que representa, sino en su condición de modelo único en su especie. Porque la tracción integral térmico-eléctrica combinada, procedente del empleo de la tecnología HYbrid4, le diferencia de todo lo existente. El 508 RXH se convierte así en un automóvil que abre nuevas tendencias en la hibridación, en el de los crossover o todocamino y en el de las berlinas familiares. Sólo Peugeot podía hacer algo así, porque sólo Peugeot contaba con los ingredientes tecnológicos adecuados para ofrecerlo.
Un sistema de arranque único
El sistema HYbrid4, con la implantación trasera de los órganos eléctricos del vehículo, aporta una nueva propuesta de tracción integral. Pero esto no es lo único que propicia que sea Peugeot el único fabricante que pueda ofrecer un producto así. El revolucionado sistema Stop&Start de la marca y las cualidades específicas de los motores Diesel Peugeot son la causa principal de que se pueda ofrecer un sistema Full HYbrid Diesel. El sofisticado alternador que emplea el equipo de puesta en marcha automático pasa por ser uno de los más evolucionados del mundo. Dotado de unos supercapacitadores de vanguardia y alta eficiencia, este sistema facilita que el motor arranque de forma imperceptible, algo que casa a la perfección con la suavidad intrínseca a todos los motores HDi. Con ello se genera una transición adecuada entre arranque y parada, cuestión clave en el desarrollo de cualquier sistema de hibridación. Por este motivo, hasta el momento, ningún otro fabricante se había atrevido a lanzar al mercado un modelo Full HYbrid Diesel, ya que hasta ahora el paso del uso del motor eléctrico al térmico o el empleo de ambos a la vez solo se podía hacer con discreción y sin vibraciones empleando para ello mecánicas de gasolina, regla hasta ahora inviolable y que Peugeot ha roto con la llegada de la tecnología HYbrid4.
Módulo eléctrico compacto y eficiente
Además, esta arquitectura es posible gracias a un módulo trasero simple y compacto que comprende el motor eléctrico y sus periféricos así como el eje trasero y las suspensiones.
Revolucionario en términos de ahorro de combustible y de emisiones de CO2, con prestaciones de alto nivel, motricidad integral y modo eléctrico, el HYbrid4 acumula también ventajas sin compromisos. El confort de conducción, la seguridad y la eco-eficiencia del conjunto son el fruto, además, de elecciones tecnológicas simples, razonables y coherentes.
La elección de la arquitectura estuvo igualmente marcada por la búsqueda de una eficacia y una coherencia óptimas. De este modo, la tecnología HYbrid4 utiliza dos motores que pueden funcionar de manera alterna o simultánea. Con ello se ha podido dar la dimensión justa a cada órgano mecánico para asegurar el conjunto de las prestaciones solicitadas. Porque el motor térmico funciona de manera óptima en trayectos por carretera y autopista o extra-urbanos. Así sigue siendo el más eficaz y el más polivalente para asegurar la movilidad de cualquier vehículo
Además, el motor eléctrico toma el relevo al térmico en las fases de rendimiento más débil, en especial en la puesta en marcha, cuando se rueda a baja velocidad o en las deceleraciones (recuperación de energía). Esto corresponde precisamente a los usos en condiciones urbanas.
El paso del motor térmico al motor eléctrico se realiza automáticamente gracias al mencionado sistema Stop&Start, cuyo sofisticado alternador de arranque pone el coche en «stand by» y arranca con total silencio y sin vibraciones el motor térmico cada vez que las condiciones así lo imponen (aceleración, baterías descargadas…) y, por tanto, de forma imperceptible.
Máxima eficiencia
Por otra parte, los dos motores pueden, igualmente, sumarse en determinadas condiciones (efecto “boost” en aceleraciones fuertes, al adelantar, por ejemplo…). Y las prestaciones del HYbrid4 son, por tanto, directamente comparables a las que se obtendrían con un único motor térmico de cilindrada superior, con mayor brío, pero beneficiándose de una auténtica revolución en términos de reducción de consumo y de emisiones de CO2 (del orden de un 35 % menos en ciclo mixto para unas prestaciones equivalentes).
No hay que olvidar tampoco que el motor eléctrico también se utiliza para mejorar el agrado de la conducción. Permite, de entrada, suavizar las interrupciones en la entrega de par durante los cambios de marcha. Además, en cada nueva puesta en marcha, la propulsión eléctrica interviene de manera sistemática, independientemente del modo seleccionado, para facilitar el arranque del vehículo. El par que proporciona el motor trasero permite que el coche reemprenda la marcha con suavidad, sin riesgo de revolucionar en exceso el motor Diesel ni de hacer patinar el embrague de manera exagerada. La fase de arranque suele ser, efectivamente, difícil de dosificar con un motor térmico, sobre todo Diesel y especialmente en cuesta, algo que con el motor HDi no es problema por su calidad de funcionamiento y eficiencia. Al final, lo que se consigue es reducir el consumo pero, al mismo tiempo, aumentar el confort de conducción gracias al aporte del motor eléctrico, que proporciona una suavidad de funcionamiento superior y que casa a la perfección con las cualidades en términos de suavidad y agrado de uso que siempre han caracterizado a los eficientes motores HDi de Peugeot.
Texto: Clásicos al Volante.
Fotografía: Peugeot.